Enemigos comunes de las abejas

Las abejas siempre vigilarán la entrada a sus nidos, pero cuando la población de abejas se debilita, las polillas de cera acceden fácilmente a las colmenas donde ponen huevos en las grietas de la colmena.

Una vez que nacen, no hay forma de deshacerse de ellas. Pueden hacer un gran lío con sus capullos que se pueden ver adheridos a las partes de madera del equipo y los panales dañados en toda la colmena.

Estos escarabajos son una verdadera molestia. Si logran poner sus huevos dentro de la colmena, sus larvas comerán polen, cera, miel, huevos de abeja y larvas. Defecan en la miel, haciendo que se fermente. El estrés de esta invasión puede hacer que la reina deje de poner huevos porque el escarabajo también se comerá los huevos. Todo esto debilita la colonia.

Para evitar que las hormigas se conviertan en un problema, controle la maleza, residuos y madera podrida. También puede intentar pintar la base de la colmena con aceite.

La mejor manera de evitar que las abejas pilladoras entren en sus colmenas es tener mucho cuidado de no derramar ningún jarabe de azúcar cuando alimente a las abejas. Evite dejar cualquier alimento para abejas justo fuera de las colmenas o encima de las colmenas.

Las abejas africanizadas son tipos de abejas melíferas que son conocidas por su comportamiento agresivo y pueden ser una amenaza potencial tanto para las abejas como para los apicultores.

Los zorrillos son insectívoros y pueden comer grandes cantidades de abejas. El problema es que, como todos los roedores, se reproducen rápidamente, por lo que si sospecha que una mofeta está visitando su colmenar, debe tomar medidas para protegerlo.

Si vive en un país con osos, trate de mantener sus abejas en lugares que no son visitados regularmente por los osos.

Sin embargo, los osos pueden oler la miel desde lejos y una vez que encuentren un patio de abejas, será difícil mantenerlos alejados. La cerca eléctrica es la única solución. De lo contrario, pueden causar un daño grave a las colmenas porque no solo se comerán toda la miel, sino que también las destruirán en el proceso.

Los ratones son uno de los animales más dañinos para las colmenas. Suelen invadir las colmenas en otoño cuando empieza a hacer frío y empiezan a buscar un lugar para pasar el invierno. Una vez dentro, causan grandes daños a los panales, destruyen los cables, se comen el polen, la miel, las larvas y las abejas. Además, defecan en todas partes, lo que es una causa adicional de estrés para las abejas, que son amantes de la higiene. Sin embargo, una colonia fuerte se deshace de estas plagas con cientos de picaduras.

Aunque todas las abejas que han picado morirán, habrán salvado la colonia. Después de matar al ratón, las abejas lo momifican cubriéndolo con cera. Entonces, si encuentra una bola de cera del tamaño de una ping-pong en una colmena en primavera, sabrá qué hay dentro.

Los humanos son el mayor enemigo de las abejas. Pero no siempre hieren o matan abejas por ignorancia, sino que a menudo roban o dañan los colmenares de otros por varias razones, por ejemplo, demandas de equipo, robo de miel, venganza, vandalismo, etc.

 

Algunos de los insectos que representan una amenaza potencial para las abejas son los insectos asesinos, moscas, mantis, avispones, libélulas, polillas de la fruta, escara- bajos, etc.

Hay al menos 24 aves que comen abejas y avispas, por ejemplo, papamoscas, colibríes, estorninos, mirlos, urracas, etc. Además, los pájaros carpinteros a menudo dañan las colmenas perforando agujeros en ellas.

El ganado, las ovejas, las cabras y los cerdos pueden causar mucho daño en un apicultor, principalmente al frotar las colmenas y volcarlas, lo que no solo molesta a las abejas sino que también mata a muchas.